Giorgio Finamore artista italiano con residencia en Venecia, con una pasión de vida llevada al trabajo en torno a la ilustración, pintura digital, escultura y el diseño.
Su arte pretende escudriñar la oscuridad, observar el cambio en el mundo, las metamorfosis del hombre, la alienación de nuestra megalópolis, la contaminación ambiental y mental.
Bajo estos cánones Giorgio nos presenta un mundo oscuro e industrializado, gobernado por máquinas y computadoras, un cuerpo híbrido, cibernético, unión de elementos orgánicos y tecnológicos.
En los espacios caracterizados por la oscuridad, emerge la luz y la criatura aparece fusionada con la robótica, a través de injertos mecánicos. El ser humano finalmente se ha convertido en lo que la sociedad quería, en un engranaje preciso pero enfermo.
Las criaturas de sus obras góticas, a menudo femeninas, son seductoras, dominantes, hechizantes y peligrosas, sus cuerpos representan el progreso de nuestra sociedad entre el pasado, el presente y el futuro.
Figuras amazónicas de una civilización arcaica o quizás deidades post-apocalípticas del futuro cercano, su forma corporal visceral, cables eléctricos fusionándose con el tejido vivo, reforzada por la imposición de coronaciones de tuberías intrincadas, fantásticas y sobrenaturales estructuras biomecánicas.
Un laberinto sagrado o una ruta de escape de nuestra sociedad.
El mundo moderno bajo la visión de un artista llamado “Giorgio Finamore”